domingo, 3 de enero de 2016

¡El reflejo se te escapa!

- Mensaje nº 1117 -

Hija mía. Mi querido hijo. Aquí estás. Por favor, escribe y escucha lo que Nosotros, el Cielo Unido, queremos decir hoy a los niños y a ti, Nuestra hija tan amada: La Navidad es la fiesta del amor, de estar juntos en familia y con los buenos y muy buenos amigos que pertenecen a tu familia, a tu vida.

En el mundo de hoy apenas tenéis tiempo para esto, y las fiestas de Navidad, así como el Año Nuevo, que se supone que os debe hacer reflexionar, están pensadas precisamente para esto: la reflexión y la orientación de la vida hacia Dios, vuestro Salvador y vuestro Creador.

Aún tenéis por delante un Día Santo, que podéis celebrar contemplativamente, pero hijos, en vuestro tiempo actual, la contemplación se ha perdido, y muchos de vosotros, amados hijos, habéis notado que este Tiempo tan Santo se ha «desacralizado» por todo el consumismo, el estrés, los regalos, las celebraciones «obligadas», y tantas cosas más que os han distraído en esta Fiesta Santa.

Niños, reflexionad y encontrad el camino hacia Jesús. No os queda mucho tiempo.

Así que aprovechad el poco tiempo que os queda, porque la venida de Jesús es inminente, pero antes vendrá el otro, y éste traerá mucho mal y calamidades, ¡y muchos de Nuestros hijos le alabarán como el que no es!

Volved en vosotros, hijos, y encontrad completamente el camino hacia el Padre, porque Él os espera con los brazos abiertos, ¡y el camino hacia Él es Jesús, Su Hijo Unigénito! Consolidaos en Él y haceos uno con Él. Entonces no os perderéis y resistiréis a los últimos días y no os extraviaréis.

Ahora es el momento de arrepentirse, de renunciar a lo mundano y de centrarse completamente en Jesús: con oración, con dignidad, con arrepentimiento, con limpieza, con expiación, con ofrendas y en perfecto amor y devoción.

Orad, hijos Míos, orad mucho y fervientemente y pedid Nuestra guía. Yo, vuestra amada Madre del Cielo, y todos los santos y ángeles del Padre estamos a vuestro lado, así que aprovechad esta última oportunidad que aún tenéis y fortaleceos.

Preparaos, porque pronto todo irá golpe a golpe . Amén.

Preparaos y no caigáis en engaños. Debéis dejar atrás lo mundano, pues sólo Jesús es el camino hacia la gloria. Amén.

Os amo. Nuestra bendición está contigo. Amén.

Tu Madre del Cielo, que tanto te ama, con los santos de la Comunión de los Santos y los Santos Ángeles del Padre. Amén.