(Informe-Marcos): En el momento señalado, llegó el Santo Ángel de la Paz. Era hermoso y gentil. Me miró con amabilidad, y sonriendo, me dijo que escribiera:
Ángel de la Paz
"Yo, Ángel de la Paz, estoy contigo siempre. Siempre te mantengo con mi luz y mi escudo. Continúa orando y confiando en el Señor que todo puede, porque todo se ha hecho por Él. Tus oraciones son siempre escuchadas por el Señor y Él provee la gracia más apropiada para todo. Siempre estoy contigo y oro por tus intenciones siempre. ¡La confianza nunca está equivocada!"