Mensajes al Refugio Sagrada Familia, EEUU

 

jueves, 21 de noviembre de 2013

Ven Santísima Trinidad

 

Hijo mío amado, te quiero entrañablemente. Esta es tu Madre, María. Amo entrañablemente a todos mis hijos. El tiempo está aquí y ahora. Están ocurriendo cosas en todo el mundo. Tengo un trabajo para ti y para tus hermanas, Las Hijas del Cordero. Trabajaréis juntas a lo grande por la Trinidad. Ahora mismo no puedo decirte nada más. Con amor, mamá. Mi Hijo quiere hablar.

Soy Jesús. Te quiero mucho. Hijo, tu trabajo será trabajar para la Trinidad, enseñando a todos Mis hijos sobre Dios a través del corazón de Mi madre, María. Toda la gente del mundo ha perdido casi toda su fe en la verdad sobre Dios, la Trinidad, el Hijo y el Espíritu Santo. La Iglesia ha diluido muchas de las enseñanzas que solían utilizarse para enseñar la verdad sobre la forma en que Dios desea que vivan Sus hijos. Los Diez Mandamientos han sido retirados de casi todas las escuelas y la gente no conoce la verdad ni sabe cómo vivir la verdad. Los refugios se utilizarán sólo para volver a enseñar a la gente sobre Dios y hacer el trabajo necesario para vivir. La oración será el nombre del juego, no el deporte, que es el dios del mundo ahora. Utilizaré a las personas a las que he estado enseñando directamente desde mi corazón y el corazón de Mi amadísima Madre, María. La gente de los refugios adorará a toda la Trinidad y glorificará a Mi Madre con todos los santos y ángeles buenos. Os enseñaremos a todos desde el Cielo a través de todos los santos y ángeles buenos y a través de los hijos remanentes que nos han estado escuchando. Da las gracias a las Hijas del Cordero por su ayuda. Las queremos mucho a todas. Con amor, Jesús y María.

Origen: ➥ childrenoftherenewal.com/holyfamilyrefuge

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