domingo, 3 de julio de 2011

Tercer Domingo después de Pentecostés.

El Padre Celestial habla después de la Santa Misa Tridentina Sacrificial y la Adoración del Santísimo Sacramento en la capilla de la casa en Göritz a través de Su instrumento e hija Anne.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. En este Santo Domingo, el tercer domingo después de Pentecostés, el octavo día de el Sagrado Corazón de Jesús, muchos ángeles entraron nuevamente en esta capilla de la casa y adoraron el Santísimo Sacramento. El símbolo de la Trinidad estaba brillantemente iluminado. La estatua del Corazón de Jesús brillaba con una luz dorada y plateada centelleante. Jesucristo señaló Su ardiente corazón de amor. Se conectó con el ardiente corazón de la Santísima Madre. Ambos corazones se fusionaron en un solo corazón.

El Padre Celestial hablará: Yo, el Padre Celestial, les hablo hoy, este Domingo, el octavo día del Corazón de Jesús, a través de Mi instrumento voluntario, obediente y humilde e hija Anne, quien está enteramente en Mi Voluntad y solo habla palabras que vienen de Mí. Nada proviene de ella.

Mis amados creyentes, Mis amados seguidores, Mi pequeña grey y pequeño rebaño, hoy fue nuevamente un día de fiesta para ustedes. Gracias especiales fueron derramados sobre ustedes, que emanaron del corazón de Jesús.

Sí, Mis amados, como han escuchado en la lectura, el maligno anda como un león rugiente e intenta devorar lo que puede devorar. Pero quien se entrega completamente a Mi voluntad, la voluntad del Padre Celestial, y en obediencia cumple Su plan, está protegido y el maligno no se atreve a acercarse a él. Se le asegura protección total, porque el Santo Arcángel Miguel y especialmente su queridísima Madre de Dios mantendrán al maligno alejado.

Pero muchos, Mis amados, aún se opondrán a Mi voluntad. Inventan excusas para que no tengan que cumplir completamente Mi voluntad. No viven en la verdad completa. Por eso debo separarlos de ustedes, por mucho que lo sienta y por amargo que sea para mí. No se entristezcan por ello, porque recuerden que el Grupo de la Cruz de la Pradera debe ser un grupo especial de élite de fe, - una tribu sólida. Todos deben poder aferrarse a este tronco, lo que significa que deben poder orientarse en los modelos. Por lo tanto, deseo una élite firme de fe.

No es fácil para ustedes, Mis amados, continuar por este difícil camino, el Vía Crucis a Golgota. Pero ¿no les he asegurado que siempre estaré con ustedes, que su queridísima Madre los acompañará en este difícil camino y que llevará su cruz con ella en este difícil camino? ¿No les he prometido esto? Los ángeles los acompañarán. Especialmente el Santo Arcángel Miguel continuará manteniendo el mal alejado de ustedes.

Sí, debo pedirles mucho a ustedes, Mis amados seguidores, que quieren seguirme a Mí, Mi voluntad y todo Mi plan, el Plan Divino. Quiero excluir todas las cosas mundanas que podrían perturbarlos. Deben estar seguros y protegidos en Mi voluntad y Mi protección. Pero cuando el mundo se les acerca, es decir, el mal, pueden alejarlo con la ayuda de su Santísima Madre, pero solo entonces, Mis amados, cuando se entregan completamente a la voluntad de su Padre Celestial en su totalidad, es decir, que no tengan contacto con nadie que no cumpla Mi plan en su totalidad y se separen de ellos.

¿A quién prefieren? ¿A quién aman más? ¿A sus hijos o a Mí? ¿No puedo guiar a sus hijos cuando me los entregan o son su propiedad? En absoluto, Mis amados. Por favor, entiendan esto correctamente. Los criaron. Han hecho todo por ellos y Yo, el Padre Celestial y también su Santísima Madre saben que es muy difícil para ustedes separarse de ellos. Pero ¿estoy pidiendo lo imposible? Exijo separación solo cuando no están en la verdad, y cuando no quieren seguir con ustedes en el camino que han tomado, el camino de la verdad. Entonces los obstaculizarán en su camino. Pero ustedes quieren continuar en este camino, porque han hecho este pacto de amor y obediencia.

Quiero atraerlos cada vez más a Mi Corazón Divino, porque los amo. Quiero darles muchos dones de gracia. Pero no puedo hacerlo si se ven obstaculizados en su camino. Por favor, no tengan ningún contacto con personas que viven en el mundo modernista. También podrían obstaculizarles.

Esto no es fácil para ustedes. A menudo están todos solos y separados de todos. Todos les dicen no: "¡No voy por este camino!" Entonces se sienten solos y abandonados. ¿Creen que su Padre Celestial no sabe cómo están? Entonces vengan al corazón del padre, - a Mí. Los consolaré. Estaré con ustedes, y les agradeceré que me hayan dado este sí voluntario y nunca quieran romperlo. Es muy difícil para Mí, el Padre Celestial en la Trinidad, si se alejan, si no cumplen esta promesa, porque los he protegido en toda lealtad y todo amor, en Amor Divino. Allí están seguros, - solo allí, Mis queridos hijos.

Yo, el Padre Celestial, quiero amarlos cada vez más y guiarlos al Corazón Triuno amoroso. Y ustedes deben devolver Mi amor en la medida de lo posible en su humanidad. Conectaré Mi Amor Divino con su amor humano. ¿Pueden entender cómo se supone que esto suceda? No pueden comprenderlo, pero lo sentirán en su corazón que nos hemos convertido en uno, como los corazones del amor. He fusionado el Corazón de Mi Santísima Madre con Mi Corazón Divino en Amor. Solo si continúan dándome un sí voluntario, entonces podré acompañarlos.

Y ustedes, Mi pequeña grey, ¡manténganse firmes! Vuelvanse cada vez más firmes en su confianza en Mi amor, en Mis caminos! Soy la luz del mundo, el verdadero camino que nunca puede desviarse. Serán guiados y conducidos. Soy su centro. Jesucristo, el verdadero Rey del Amor, lo reciben y se unen a Él en cada Santa Misa de sacrificio. ¿No es algo especial unirse a este amoroso Corazón de Mi Hijo Jesucristo en la Sagrada Comunión, poder recibirlo dignamente con todos los dones de gracia que les da porque los ama, - ama sin límites? Estén preparados para todo, Mis queridos hijos, para sacrificios pesados. Estoy con ustedes en la tribulación. No los estoy abandonando. Siempre recuerden esto si el camino les parece demasiado difícil.

Mi pequeño amado, ¡no tengas miedo! Es un camino difícil y solitario que estás recorriendo. Si uno tras otro se aleja, Mi pequeño amado, sufrirán. ¿Por qué? Porque Mi Hijo Jesucristo sufre en ti. Sufre el Nuevo Sacerdocio y la Nueva Iglesia, que nunca entenderán. Pero entréguense a la voluntad de Mi Hijo Jesucristo. Entréguense a Su amor y conecten su corazón con Él. Él viene a encontrarse con ustedes.

Y ustedes, Mi querida pequeña grey, apoyen a Mi pequeño. No es fácil para ustedes tampoco mantenerse firmes siempre, sufrir y apoyar.

Mis amados seguidores, Mi querida pequeña grey, acompañan a Mis pequeños en este camino. Serán apoyados por su firmeza. Fortalecerán y no se aflojarán cuando cumplan Mi voluntad en su totalidad.

Les agradezco a todos por su amor, que le dan al Dios Triuno, a Mí, el Padre Celestial en la Trinidad. Solo puedo repetir: los amo, ustedes Mis hijos, Mis queridos hijos, Mis queridos de la fe!

Y así los bendigo en la Trinidad, con Mi queridísima Madre, con todos los ángeles y santos, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

¡Superen las pruebas del sufrimiento! Es solo un corto tiempo aquí en la tierra para que todo exista, pero la eternidad siempre permanece! Nunca se detiene cuando se les permite ver la gloria del cielo una vez! Amén.